
De acuerdo a un estudio de la Comisión de Medio Ambiente de la Unión Europea titulado En bici, hacia ciudades sin malos humos se mencionan además los siguientes beneficios:
- Ausencia total de impacto sobre la calidad de vida urbana (ni ruido, ni contaminación).
- Conservación de los monumentos y las zonas verdes.
- Menor necesidad de superficie, tanto para desplazarse como de estacionamiento, y, por lo tanto, mayor rentabilidad del suelo.
- Menor deterioro de la red vial y reducción del programa de nuevas infraestructuras viales.
- Mayor atractivo del centro urbano (comercios, cultura, actividades recreactivas, vida social).
- Reducción de los embotellamientos y las pérdidas económicas que estos generan.
- Mayor fluidez del tráfico automovilístico.
- Mayor atractivo del transporte público.
- Mayor accesibilidad a los servicios de la ciudad para todas las personas.
- Ahorro de tiempo y de dinero para los viajes en transporte.
- Ahorro considerable de tiempos para las personas que usan la bici en los trayectos cortos y de medias distancia.
- Posible desaparición de la necesidad de un segundo coche por hogar (y en consecuencia, aumento de la parte de presupuesto disponible para los hogares).

